Fernando Alcalá era un joven abogado, hasta que la cocina se cruzo en su camino y descubrió su verdadera vocación cuando su familia, de origen vasco y apasionados por la gastronomía, decidió abrir un restaurante y Fernando vio que su sitio estaba en los fogones. El lugar perfecto para conjugar su gran cultura culinaria, la que ha vivido en su casa y sus visitas a los grandes templos ,de la cocina, con sus propios planteamientos gastronómicos, que plasma en el restaurante Kava en la avenida Antonio Belón, 4 de Marbella, en donde ofrece un menú degustación de cocina creativa de mercado, cuidando mucho a técnica, así como el producto, y también en Cotxino «el Bar de Kava», con una sabrosísima y apetecible carta de picoteo clásico, pero primorosamente elaborado.
Fernando es un gran conocedor y defensor del producto y recetario malagueño, así como de la gastronomía andaluza, que combina sutilmente con técnicas provenientes de diferentes zonas, tanto del resto de España, como Estados Unidos, Perú o Asia. Y además, en 2019 ganó el premio de “Cocinero Revelación en Madrid Fusión”, un Bib Gourmand de la Guía Michelín y el premio a la Mejor Tarta de Queso de España otorgado por un jurado compuesto por Paco Torreblanca, Susi Díaz, el gran heladero riojano Fernando Sáez (Obrador Grate) o el crítico gastronómico José Carlos Capel.
En 2022 ha recibido el Premio Paul Schiff al Mejor Cocinero, otorgado por la Academia Gastronómica de Málaga, en homenaje a unos de los precursores de la alta cocina de la Costa del Sol como era Paul Schiff, nacido en Bélgica pero nacionalizado español, recaló en Marbella en los años 60 y su mítico restaurante La Hacienda fue el primero de Andalucía en conseguir dos estrellas Michelin.